domingo, 22 de mayo de 2011

OWEN : El Cooperativismo como solución

La escuela neoclásica (Jevons, Marshall) es un enfoque económico basado en el análisis marginalista y el equilibrio de oferta y demanda. Entre los supuestos de enfoque neoclásico está que el comportamiento económico surge del comportamiento agregado de individuos que son racionales y tratan de maximizar su utilidad o beneficio (el ejemplo de la Coca-Cola)…hasta la última lata/gota (la marginal…).
Frente a este “equilibrio” entre lo que venden los capitalistas y compran los consumidores está Marx, y para él la clave del capitalismo era la explotación como fuente de beneficios y de crisis. El capitalista se apropiaba de una plusvalía material (lo que obtiene del trabajo que no remunera)…y, al final, “el motor de la historia era la lucha de clases” (Dialéctica). Ya tenemos el famoso Materialismo Histórico Dialéctico.
Y entre el negocio de compra-venta (demanda/oferta) y la lucha revolucionaria ¿No hay otras ideas de los expertos economistas?
Hablaremos de Robert Owen (1771-1858), socialista utópico, considerado como el padre del cooperativismo.
Nacido en Newton, Gales, uno de los centros industriales textiles británicos, Robert Owen no creía que la explotación y malas condiciones laborales de los trabajadores fuesen una condición necesaria para la acumulación de Riqueza. Por esta razón, Robert Owen hizo un experimento en las fábricas de New Lanark -cuya dirección asumió en 1800 al casarse con la hija del dueño-… zona donde los trabajadores eran conocidos por libertinos y borrachos. Sus ideas de reforma social le llevaron a establecer  en Escocia la cooperativa obrera New Lanark.
La teoría consistía en que una fuerza de Trabajo satisfecha era una mano de obra eficiente. "Mejorando el entorno se mejora al hombre", solía repetir. De este modo, en su fábrica redujo el trabajo de los niños y dio énfasis a la educación. Elevó los salarios, disminuyó los horarios,  dio más luz a las fábricas, y construyó áreas verdes.
Los resultados que obtuvo Robert Owen fueron sorprendentes: contrariamente a los pronósticos, se obtuvieron sustanciosos beneficios en New Lanark. Pero todo esto acabó por enfrentarle a sus socios capitalistas…que podían ganar más sin tanto gasto “superfluo”.
Robert Owen creía en la posibilidad de desarrollar un sistema económico alternativo basado en la cooperativa . Su planteamiento era utópico, pero no irreal, porque pretendía sustituir el sistema capitalista por otro más justo que evitara los problemas en la agricultura e industria británicos. Desde su perspectiva los obreros debían unirse para crear una nueva realidad basada en cooperativas que fuesen más rentables que las industrias. Cooperativas de producción que fabricasen y cultivasen con salarios dignos y Cooperativas de distribución que vendiesen esos productos a precios razonables. Ideó los Bazares Obreros, establecimientos de intercambio de productos por medio de bonos cuya unidad era la hora de trabajo rendido.

Muchos piensan que sus ideas se apoyan en Rousseau “El hombre es bueno por naturaleza pero las circunstancias no le dejan serlo”…”La naturaleza ha hecho al hombre feliz y bueno, pero la sociedad lo deprava y lo hace miserable”.
Es interesante su percepción pacifista de que simultáneamente a las ideas de que una comunidad ejemplar puede servir de soporte a un cambio social profundo,  esta  reforma social puede ser independiente de una acción política y la toma del poder.
Los socialistas utópicos defienden la cooperativa como  instrumento de reforma moral y política, debido a sus ideales socialistas basados en la perfectibilidad del ser humano mediante la educación y la mejora de su entorno. Consideran que la cooperativa es la mejor forma de organización de la unidad productiva, porque dentro de ella el incentivo para el trabajo es mayor que el mero salario. Esta organización eficiente de la producción nos llevará a la abundancia, lo que a su vez facilitará esa reforma moral que pretenden…
Es interesante conocer algo sobre Owen (que vivió en la época inglesa de Marx, Jevons y Marshall)…. ¿ socialista o economista utópico?

Mark de Zabaleta







sábado, 14 de mayo de 2011

La Paradoja de Jevons

Marshall llegó a resumir el pensamiento marginalista de finales del siglo XIX con grandes aportaciones de economistas como Jevons, Menger, Walras y Pareto. Merece la pena recordar algo de Jevons.
La conocida como  “Paradoja de Jevons” (planteada por William Stanley Jevons  en su libro  de 1865 The Coal Question /La problemática del Carbón)  afirmaba  que mejorar la eficiencia en el consumo del carbón implicaba  un mayor uso de máquinas de vapor en más industrias, con lo que el consumo total de carbón al final era mayor…hay que tener en cuenta que Watt había mejorado mucho el primer diseño de máquina de vapor (Newcomen)…y su consumo de carbón.
La paradoja de Jevons  lleva a un resultado:  mejorar  la eficiencia disminuye el consumo instantáneo pero incrementa el uso del modelo optimizado,  lo que provoca un aumento del consumo global.
Resumiendo, que ahorramos más en energía para acabar gastando más ¡!
Esta paradoja se ha observado en múltiples situaciones de nuestra vida cotidiana.
La paradoja puede explicarse de dos maneras :
-         En primer lugar, se debe entender que una mayor eficiencia en el uso de la energía alienta un mayor uso de la misma, que sobrepasa el efecto de ese ahorro.  A pesar de que los motores de los automóviles son ahora más eficientes ( modelos híbridos, eléctricos…), lo cierto es que se tendería paulatinamente a utilizar cada vez más estos vehículos, los cuales, además, recorrerán una mayores  distancias diariamente…gastando más electricidad, cuyo consumo aumentará sensiblemente en el futuro.
-         La segunda explicación estaría dada por el hecho de que en la medida en que la mayor eficiencia económica eleva los beneficios económicos del país, también incrementa el proceso de acumulación y crecimiento en varios sectores de la economía, que terminarán por consumir cada vez más energía en una espiral que se autoalimenta.
Mayor crecimiento, más necesidad de industrias subsidiarias…más consumo…mayores ingresos, más gasto en vehículos de nueva generación…y vuelta a consumir ¡!

Nos debemos plantear, quizás, si el ahorro energético de reducir la velocidad máxima en nuestras autopistas a 110 seguirá esta Paradoja…


Mark de Zabaleta




sábado, 7 de mayo de 2011

“Ceteris Paribus” de Alfred Marshall

Alfred Marshall (1842-1924) es uno de los pioneros de la Economía Neoclásica.
Para la economía clásica el equilibrio de los precios llegaba de forma natural (la famosa “mano invisible” de Adam Smith), e incluso Marx contemplaba un “determinismo económico”.
Con la perspectiva Neoclásica se analiza el comportamiento de las unidades económicas que toman las decisiones (familias, empresas…), y este análisis llevó la Microeconomía a un primer plano.
El ceteris paribus (del latín, todo lo demás constante) de Marshall establece que para analizar un problema económico se debe asumir que todo el resto de los factores económicos permanecen constantes.
Y analizaba  cada situación, independiente,  rigurosamente.  Por ejemplo,  un  Consumidor puede estar dispuesto a pagar por una Coca Cola 5 euros  por la primera lata que adquiere (cuando tiene más sed); estaría dispuesto a pagar sólo 4 por la segunda unidad de ese bien y…3 por la tercera (ya está saciado) debido a que la utilidad que va generando es cada vez menor. Pero dado que los Precios  se fijan en el Mercado de acuerdo a la Utilidad Marginal de esa lata de Coca Cola, dicho Consumidor podrá probablemente comprar las tres unidades de ese  bien  a un precio de 3 euros. Por lo que este señor se ahorraría en la compra de tres latas 3 euros…y tendríamos el famoso “Excedente del Consumidor”.
Analizaba el comportamiento de los consumidores individuales bajo este prisma de la “utilidad marginal decreciente”, y agregaba esas tablas de datos para generar la curva de demanda (precio/cantidad) del mercado. Pero exigía que un determinado número de condiciones no cambiaran: los gustos y las rentas del consumidor y los precios de los otros bienes.
Está claro que al consumidor le gusta la Coca Cola (más que la tónica por ejemplo), que tiene dinero suficiente para darse ese capricho y que el vendedor de refrescos no tiene una oferta  de Pepsi a mitad de precio!...los precios del resto de bebidas alternativas no deben variar. Y así podremos realizar un análisis riguroso.
Ese es el famoso “ceteris paribus”
Muchos de los instrumentos que usamos los economistas en nuestro trabajo diario (la elasticidad de la demanda, el excedente del consumidor, las curvas de oferta y demanda en comercio...) fueron acuñados o popularizados por Alfred Marshall.

Mark de Zabaleta



domingo, 1 de mayo de 2011

Karl Marx sólo publicó un primer volumen de El capital

Desde su llegada a Londres en 1849,  Marx tuvo un poco de tiempo para consagrarse a  El capital…un borrador que había iniciado un par de años antes.
Para él la clave del capitalismo era la explotación como fuente de beneficios y de crisis.
Con el tiempo, se producen conflictos entre la superproducción y la incapacidad de las economías para absorberlas (la Ley de Say de la economía clásica por la que toda oferta genera su propia demanda quedaba en entredicho).
La explotación en el plano económico equivaldría  a la alienación de Hegel.
Durante treinta años visitando diariamente la biblioteca del British Museum escribirá infinidad de notas y bosquejos…pero casi todo queda en forma de apuntes.
Leyó a los economistas clásicos…y retomó en lo esencial el enfoque de David Ricardo sobre el trabajo incorporado: las horas de trabajo necesarias para proporcionar los medios de subsistencia a la mano de obra, y permitir su sustitución en la siguiente generación, era lo que determinaba el valor del trabajo (no cualificado).
Será Engels (gran amigo, y obligado colaborador) quien le convence para que  entregue sus manuscritos, una parte de ellos, y publicar así en 1867 un primer volumen de El capital, iniciado veinte años antes.
Los volúmenes siguientes, dedicados a las crisis, quedarán en estado de borrador…el segundo en 1885 y el tercero en 1894, tras la muerte de Karl Marx en 1883...fue Engels, su amigo, quien los preparó.
Pero Marx siempre conserva dos ideas clave del hegelianismo:
-         La de una “razón” en la historia, una permanente transformación que se pliega a las oscuras e implacables leyes del capital.
-         La Dialéctica, una confrontación y lucha entre contrarios (clases)
Aunque Marx pasó del idealismo de Hegel a convertirse en materialista, el fondo de su pensamiento siempre está ahí.
Fue Georgi Plejánov en la Rusia de Lenin quién acuñó la denominación de “materialismo histórico dialéctico”.
La Revolución socialista que planteaba como emancipación definitiva y global del hombre (al abolir la propiedad privada de los medios de producción, que era la causa de la alienación de los trabajadores), completando la emancipación meramente jurídica y política realizada por la Revolución burguesa (que identificaba con el modelo francés); sobre esa base, apuntaba hacia un futuro socialista entendido como realización plena de las ideas de libertad, igualdad y fraternidad, como fruto de una auténtica democracia……la «dictadura del proletariado» tendría un carácter meramente instrumental y transitorio

Mark de Zabaleta