El claro ascenso de
Podemos y, en menor medida, de Ciudadanos, junto al descalabro del PP, han permitido crear un escenario hasta ahora
nunca conocido: sin mayorías claras, los gobiernos municipales quedan pendientes
de pactos post-electorales.
"Cuando un hombre ha ocupado un puesto,
investido de poder por largo tiempo, puede llegar a persuadirse de que aquel
puesto es de su propiedad particular, y está bien que un pueblo libre se
ponga en guardia contra tales tendencias de ambición personal; sin embargo, las
teorías abstractas de la democracia y la práctica y aplicación efectiva de
ellas, son a menudo necesariamente diferentes, quiero decir, cuando se prefiere
la sustancia a la forma". (Porfirio Díaz)
Y Esperanza Aguirre ha
permitido recordar los dicho por este militar y dictador mexicano…
El pueblo ha hablado, y
ya cansado de tanta promesa y de tanta recuperación económica que nunca llega,
prefiere apostar por un verdadero cambio.
Aunque
en el Partido Popular nadie se ha enterado, y siguen
pensando en mover las fichas de su tablero de ajedrez: si Guindos se va a
Bruselas se nombra a “otro” y si Cospedal deja la secretaría del partido le
nombran ministra de educación, etc… Mariano
sigue manejando su cortijo.
Y la imagen del PP ante
los ciudadanos sigue en caída libre…hasta las generales…
Lo que es obvio es que ni
Ciudadanos ni Podemos lo pueden hacer peor que Mariano.
Manuela
Carmona en Madrid y Ada
Colau en Barcelona son la evidencia de que el pueblo quiere otra cosa…porque
van a ser buenas regidoras.
Y
dentro de un par de años nos habremos olvidado de Esperanza Aguirre y de Xavier
Trías, y parecerá todo perfectamente normal.
El Partido Socialista ha
aprovechado esta situación para creerse que todavía lidera la izquierda en
España. Craso error.
El
PP y el PSOE quieren salvar los muebles y ocultar su claro varapalo
El PP ha perdido la
mayoría del poder autonómico que tenía desde 2011, puesto que no ha logrado
revalidar ninguna de sus mayorías absolutas. Los populares han sido los más votados
pero su caída respecto a 2011 es espectacular: 11 puntos y casi 2,5
millones de votos perdidos. En unas municipales éste ha sido su peor resultado
desde 1991. ¿Victoria?
El PSOE se mantiene en
segunda posición con un 25% de los votos situándose casi tres puntos por debajo
del 2011. Los socialistas, con Pedro Sánchez, no han logrado superar el nivel de
hace cuatro años, pero el hecho de que el PP haya caído a su mismo nivel y, además, tenga
la posibilidad de gobernar en un buen número de autonomías y de municipios, siempre pactando con Podemos,
puede presentarlo como una ¿victoria?
Mark
de Zabaleta