lunes, 29 de agosto de 2011

Paradojas de Zenón: ¿Deuda Pública?

Las paradojas de Zenón son una serie de paradojas ideadas por Zenón de Elea para apoyar la doctrina de Parménides de que las sensaciones que obtenemos del mundo son ilusorias, y que no existe el movimiento. Racionalmente, una persona no puede recorrer un estadio de longitud, porque primero debe llegar a la mitad de éste, antes a la mitad de la mitad, pero antes aún debería recorrer la mitad de la mitad de la mitad y así eternamente hasta el infinito. De este modo, teóricamente, una persona nunca podría recorrer ese estadio.
Aquiles y la tortuga
Aquiles, llamado "el de los pies ligeros", decide salir a competir en una carrera contra una tortuga. Ya que corre mucho más rápido que ella, y seguro de sus posibilidades, le da una gran ventaja inicial. Al darse la salida, Aquiles recorre en poco tiempo la distancia que los separaba inicialmente, pero al llegar allí descubre que la tortuga ya no está, sino que ha avanzado, más lentamente, un pequeño trecho. Sin desanimarse, sigue corriendo, pero al llegar de nuevo donde estaba la tortuga, ésta ha avanzado un poco más. De este modo, Aquiles no ganará la carrera, ya que la tortuga estará siempre por delante de él.
España y la deuda pública
Aplicando las nuevas medidas constitucionales para reducir la deuda…cuando nuestro Aquiles llegara a la deuda, ésta ya se habría alejado (por el pago de intereses que seguiría incrementando esta deuda). Sin desanimarse, España seguirá recortando gastos, pero al llegar de nuevo, la deuda se habrá incrementado un poco más. De este modo España no ganará la carrera, ya que la deuda siempre estaría por delante…
Desde el punto de vista estrictamente matemático, las paradojas de Zenón pertenecen a la categoría de sofismas, esto es, que son razonamientos falsos. Ello se debe a una falta de conocimientos sobre el concepto de infinito en la época en la que fueron formuladas, ya que, como demostró el matemático escocés James Gregory (1638-1675), una suma de infinitos términos puede tener un resultado finito.
Aunque efectivamente esta Paradoja no sea más que una gota de humor en esta dura Crisis…Merece la pena reflexionar sobre la lógica de algunas iniciativas que pueden frenar nuestra capacidad de crecimiento. La deuda pública es fundamental para reactivar el flujo circular de la renta e implementar una política keynesiana. Las medidas sugeridas por la UE (Alemania) no son aplicables por igual en esta Unión Virtual (el Euro y poco más…). España, con un paro del 20%, no puede tener las mismas limitaciones de endeudamiento que Alemania…¿Imaginan que se obligase a todos los ciudadanos a limitar su endeudamiento con un mismo porcentaje? Es fácil deducir que para los ricos no supondría mayor problema, pero los más desfavorecidos lo tendrían muy complicado para poder invertir, crear un negocio, consumir etc…

Mark de Zabaleta


martes, 23 de agosto de 2011

¿Quién era Milton Friedman? (II) Chile pasa factura…

Para entender el monetarismo, lo primero que hay que saber es que la palabra dinero” no significa exactamente lo mismo en economía que en el lenguaje común. Cuando los economistas hablan de oferta monetaria  no se refieren a la riqueza en el sentido corriente. Se refieren sólo a esas formas de riqueza que pueden emplearse más o menos directamente  para comprar cosas.  La moneda –pedazos de papel con dibujos de figuras prominentes- es dinero; y también los depósitos bancarios contra los que se pueden extender cheques. Pero las acciones, los bonos y las propiedades inmobiliarias no son dinero, porque tienen que ser convertidos en efectivo o en depósitos bancarios si queremos utilizarlos para hacer compras.
Antes de Keynes, los economistas consideraban la oferta monetaria un elemento primordial de la gestión económica. Pero Keynes afirmó que en situaciones de depresión, cuando los tipos de interés son muy bajos, los cambios en la oferta monetaria tienen escaso efecto sobre la economía. Y por eso, él y sus seguidores creían que hacía falta una política Fiscal -en especial un aumento del gasto público- para sacar a los países de la Gran Depresión.
Friedman hizo una cruzada a favor de la propuesta de que el dinero también importaba con la publicación en 1963 de A monetary history of the United States, 1867-1960, en colaboración con Anna Schwartz.
Su análisis más influyente y controvertido fue el relativo a la Gran Depresión. "La contracción" de la economía, declaraban, "es de hecho un trágico testimonio de la importancia de las fuerzas monetarias".
En 1976, Friedman les decía a los lectores de Newsweek que "la verdad elemental es que la Gran Depresión se produjo por una mala gestión pública", una declaración que seguramente sus lectores interpretaron como que la depresión no se habría producido si el Estado se hubiera mantenido al margen, cuando de hecho lo que afirmaban era que el sector público debería haberse mostrado más activo, no menos.
La Reserva Federal adoptó oficialmente objetivos monetarios al estilo Friedman en 1979, pero los abandonó de hecho en 1982, cuando la tasa de desempleo superó el 10%.
Durante la década de 1990, Japón experimentó una especie de reproducción a pequeña escala de la Gran Depresión.
La tasa de desempleo nunca llegó a los niveles de la Depresión, gracias a un enorme gasto en obras públicas que hizo que cada año Japón, con menos de la mitad de población, vertiese más cemento que Estados Unidos. Pero las condiciones de tipos de interés muy bajos que se dieron en la Gran Depresión reaparecieron con fuerza. Hacia 1998, el tipo del dinero a la vista, los tipos de los préstamos a un día entre bancos, era literalmente cero.
Y en esas condiciones, la política monetaria resultó tan ineficaz como Keynes había afirmado que lo fue en los años treinta. El Banco de Japón, el equivalente japonés a la Reserva Federal, podía aumentar la base monetaria, y lo hizo. Pero los yenes añadidos se guardaban, no se gastaban. Los únicos bienes de consumo duradero que se vendían bien, me dijeron por aquel entonces algunos economistas japoneses, eran las cajas fuertes.
Friedman Una y otra vez pedía soluciones de mercado a problemas -educación, atención sanitaria, tráfico de drogas ilegales- que en opinión de casi todos los demás exigían una intervención estatal extensa.
Hace una década era normal citar el éxito de la economía chilena, en la que los asesores de Augusto Pinochet, educados en Chicago, se habían pasado a las políticas del libre mercado después de que Pinochet se hiciera con el poder en 1973, como prueba de que las políticas inspiradas por Friedman mostraban la senda hacia un próspero desarrollo económico.
En la reseña de 1965 sobre Monetary history, de Friedman y Schwartz, el fallecido premio Nobel James Tobin acusaba levemente a los autores de ir demasiado lejos. "Considérense las siguientes tres proposiciones", escribía. "El dinero no importa. Sí que importa. El dinero es lo único que importa. Es demasiado fácil deslizarse de la segunda proposición a la tercera". Y añadía que "en su celo y euforia", eso es lo que muy a menudo hacíFriedman y sus seguidores.
Posiblemente  (Friedman es) el más brillante comunicador de las ideas económicas a los ciudadanos en general que jamás haya existido. Pero hay buenas razones para sostener que el friedmanismo, al final, fue demasiado lejos, como doctrina y en sus aplicaciones prácticas. Cuando Friedman inició su trayectoria como intelectual público, había llegado la hora de llevar a cabo una contrarreforma contra el keynesianismo, y todo lo que eso conllevaba. Pero lo que el mundo necesita ahora, diría yo, es una contra-contrarreforma.
Paul Krugman es profesor de Economía en la Universidad de Princeton y premio Nobel de Economía 2008.

Mark de Zabaleta








lunes, 15 de agosto de 2011

¿Quién era Milton Friedman? (I)

(Nueva York, 1912 - San Francisco, 2006)  Milton Friedman es el principal representante de la llamada Escuela de Chicago, grupo de economistas que considera que los mercados competitivos libres de la intervención del Estado contribuyen a que el funcionamiento de la economía sea más eficiente.
Como curiosidad, durante los años cincuenta, Friedman viajó a Europa como asesor del Plan Marshall. En 1976 recibió el Premio Nobel de Economía.
A continuación he resumido un excelente artículo titulado ¿Quién era Milton Friedman?  escrito por Paul Krugman sobre este gran economista.
Milton Friedman desempeñó tres funciones en la vida intelectual del siglo XX. Estaba el Friedman economista para economistas, que escribía análisis  más o menos apolíticos sobre el comportamiento del consumidor y sobre  la inflación. Estaba el Friedman creador de políticas económicas, que pasó décadas haciendo campaña a favor de la política conocida como monetarismo y que acabó viendo cómo la Reserva Federal y el Banco de Inglaterra adoptaban su doctrina a finales de la década de 1970, sólo para abandonarla algún tiempo más tarde por considerarla inviable. Por último, estaba el Friedman ideólogo, el gran popularizador de la doctrina del libre mercado.
Friedman aplicó la idea del comportamiento racional. Sostenía que después de un periodo de inflación sostenido, las personas introducirían las expectativas de inflación futura en sus decisiones, lo cual anularía cualquier efecto positivo de la inflación sobre el empleo. Por ejemplo, una de las razones por las que la inflación puede aumentar el empleo es que contratar a más trabajadores se vuelve más rentable cuando los precios suben más que los salarios. Pero en cuanto los trabajadores comprenden que el poder de adquisición de sus salarios se verá erosionado por la inflación, demandarán un aumento salarial  por adelantado.
Al predecir el fenómeno de la estanflación, Friedman (y Phelps) alcanzaron uno de los grandes triunfos de la economía de posguerra. Este triunfo, más que ninguna otra cosa, confirmó a Milton Friedman en su categoría de grande entre los economistas, independientemente de lo que pudiera pensarse de sus demás actividades.
"A Milton todo le hace pensar en la oferta monetaria. Bien, a mí todo me hace pensar en sexo, pero no lo pongo por escrito", escribía en 1966 Robert Solow, del MIT. Durante décadas, la imagen pública y la fama de Milton Friedman se definieron en gran medida por sus pronunciamientos sobre la política monetaria y su creación de la doctrina conocida como monetarismo. Sorprende darse cuenta, por tanto, de que el monetarismo se considera en gran medida un fracaso, y que parte de lo dicho por Friedman sobre el “dinero” y la política monetaria -no lo que dijo acerca del consumo y la inflación- parece haber sido engañoso, quizá de forma deliberada.
Continuará…
Mark de Zabaleta
http://www.markdezabaleta.com/

domingo, 7 de agosto de 2011

Colón se equivocó en su descubrimiento. La Tierra es plana…

Thomas Loren Friedman (20 /07/1953) es un periodista y escritor americano tres veces ganador del Premio  Pulitzer.
En  The World is flat hace alusión, por ejemplo, a que un tanto por ciento muy elevado de las declaraciones de hacienda para ciudadanos estadounidenses  se llevan a cabo en la India … De ahí el título del libro, El mundo es plano,  ya que la idea que nos transmite el autor, es que puedes hacer cualquier cosa desde cualquier punto del mundo gracias a la revolución tecnológica (Internet) y la Globalización.
¿Y por qué la Tierra es plana y no esférica? Según Friedman, la globalización ha actuado como un poderoso aplanador del planeta; en concreto, ha logrado reducir o eliminar las diferencias que existían entre ricos y pobres, entre europeos e indios, entre norteamericanos y chinos.
Las relaciones sociales están ahora más equilibradas, y los distintos individuos compiten en un mismo terreno de juego, sin desniveles. La deslocalización, la subcontratación, internet o buscadores como Google permiten que las personas compitan "de tú a tú", sin que las limitaciones en comunicación y los retrasos del pasado restrinjan sus interrelaciones.
Y es en estos momentos de Crisis cuando más constatamos la total interrelación de los mercados financieros. Los ataques especulativos contra la Deuda Pública Española (el ya famoso aumento de la prima de riesgo) vienen desde Entidades Gestoras de Fondos de Inversión de todas partes del planeta…y de forma coordinada!
Aunque la Teoría Económica puede poner en tela de juicio algunos de los planteamientos presentados en este libro, me parece interesante que conozcamos la existencia del “otro” Friedman…
Del gran economista Milton Friedman hablaremos detenidamente….

Mark de Zabaleta