El principio de
incompetencia de Peter expone que las personas que realizan bien su trabajo son
promocionadas a puestos de mayor responsabilidad, hasta que alcanzan su nivel
de incompetencia (The Peter Principle,1969)
Ya en 1910, José Ortega y Gasset habló del
siguiente aforismo: "Todos los
empleados públicos deberían descender a su grado inmediato inferior, porque han
sido ascendidos hasta volverse incompetentes".
Lawrence J. Peter deduce
las dos siguientes secuencias:
. Con el tiempo, todo puesto tiende a ser
ocupado por un empleado que es incompetente para desempeñar sus obligaciones.
. El
trabajo es realizado por aquellos empleados que no han alcanzado todavía su
nivel de incompetencia.
Peter afirma que hay
muchos ejemplos para ilustrar su teoría …
Un buen mecánico que es
ascendido al puesto de encargado. Desde su nuevo papel, no para de entorpecer
la labor de sus subordinados; es incapaz de quedarse quieto y se mete continuamente
a hacer sus reparaciones, no permitiéndoles trabajar. Se pierde de golpe un
gran técnico y se gana un mal gestor, o como en el caso del ejemplo: se pierde
un gran oficial y se gana un mal encargado.
¿Quién
no se ha encontrado a lo largo de su vida profesional con casos parecidos?
En un estudio que se hizo
usando datos de empresas, en concreto del área de ventas, donde es más sencillo
evaluar la competencia (nivel de ventas), los números parecen confirmar que los
equipos dirigidos por quien fuera vendedor estrella tienden a vender menos, y
viceversa: los que mejor funcionan están dirigidos por antiguos vendedores
mediocres.
El Principio de Peter se
ha demostrado en multitud de empresas e instituciones. Puedes comprobarlo
echando un vistazo a tu alrededor. El típico incompetente es aquel que cree que
se las sabe todas y se considera imprescindible, pero tiende a escapar de toda responsabilidad,
echando balones fuera, y, fundamental, es un experto del peloteo.
Peter llega incluso a plantear
en su libro que algún filántropo le financie una cátedra de “jerarquiología” en
una universidad importante: “Al haber demostrado, en mis empeños actuales,
estar capacitado, estoy preparado para el puesto”.
Como
dijo Galbraith: “Aunque todo lo demás falle, siempre podemos asegurarnos la
inmortalidad cometiendo algún error espectacular”…
Mark
de Zabaleta