Un economista se
encontraba en su despacho escribiendo un artículo sobre Macroeconomía mientras
su hijo de cinco años no paraba de juguetear con los papeles y revistas.
Le pidió al niño que se
fuese a otro sitio, pero viendo que era imposible, pensó en algo que pudiera
distraerle…Vio una revista donde venía una mapa de España ilustrando la subida
de las tarifas eléctricas, ¡ justo lo que necesitaba !
Con unas tijeras
recortó el mapa en varios pedazos y junto con un rollo de cinta adhesiva se lo
entregó a su hijo, diciendo: “Como te gustan los rompecabezas, te voy a
dar España rota, para que la arregles sin ayuda de nadie”.
Calculó que al crío le
llevaría días componer el mapa…
Pasados unos minutos
escuchó la voz del niño: “Papá, papá, ya lo he acabado”. Al principio no dio
crédito a las palabras del niño. Pensó que, a su edad, era imposible recomponer
un mapa que jamás había visto antes.
Desconfiado, el
economista levantó la cabeza de sus anotaciones y, para su sorpresa, el mapa
estaba completo. Todos los pedazos estaban en su lugar. ¿Cómo lo había hecho?
Le dijo: “Hijo mío, tú no sabías como era España, ¿Cómo has logrado
recomponerla?”. El pequeño respondió: Papá, yo no sabía cómo estaba España, pero cuando
sacaste el mapa de la revista para recortarlo, vi que al otro lado estaba la
figura de un hombre (¿un ciudadano?)…
“Así que di la vuelta a
los recortes y comencé a recomponer al hombre, que sí sabía cómo era. Cuando
conseguí arreglar al hombre, di la vuelta a la hoja y vi que había arreglado
España”.
Como
dijo Groucho Marx : “Hasta un niño de
cinco años sería capaz de entender esto… ¡Rápido, busque a un niño de cinco
años!”
¿Hablaba Groucho Marx
de la política Económica de Mariano?
Mark
de Zabaleta
2 comentarios:
Tan fácil como eso.
Urge un niño en víspera de Reyes... Imaginemos que no todo está perdido.
Salud.
Precioso ejemplo el que nos expones. Una razón más para darnos cuenta, si es que queremos, que las cosas nunca tienen una sola solución y que, en cualquier caso, la solución no puede plantearse contra las personas que, en definitiva, somos el sostén de la vida, del estado y de todo. Un abrazo.
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